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ENFERMEDADES INFECCIOSAS PARA EL VIAJERO


Borreliosis De Lyme (Enfermedad De Lyme)
Brucelosis
Carbunco
Cólera
Dengue
Encefalitis Japonesa
Enfermedad Meningocócica
Encefalitis por Garrapatas
Enfermedades por Hantavirus
Esquistosomiasis (Bilharziasis)
Fiebre Amarilla
Fiebres Hemorrágicas
Fiebre Tifoidea
Filariasis
Giardiasis
Gripe
Hepatitis A
Hepatitis B
Hepatitis C
Hepatitis E
Legionelosis
Leishmaniasis
Leptospirosis
Listeriosis
Meningitis por Haemophilus
Peste
Rabia
Sras (Síndrome Respiratorio Agudo Sever)
Tripanosomiasis Africana
Tripanosomiasis Americana
Tuberculosis
Tifus
Infecciones De Transmisión Sexual



Borreliosis De Lyme (Enfermedad De Lyme)
Transmisión: La infección se produce por la picadura de garrapatas infectadas, tanto adultas como en fase larvarea de ninfas, del género Ixodes. La mayoría de las infecciones humanas son consecuencia de las picaduras de ninfas. Muchas especies de mamíferos pueden infectarse y los venados actúan como un importante reservorio. Naturaleza de la enfermedad: La enfermedad normalmente tiene su aparición en verano. Las primeras manifestaciones en la piel son máculas o pápulas rojas que se extienden en forma anular, a menudo con una zona central clara. Son comunes fiebre, escalofríos, mialgia y dolor de cabeza. A continuación puede producirse implicación meníngea. Semanas o meses después de la aparición de la enfermedad puede comprometerse el sistema nervioso central u otras complicaciones. Puede desarrollarse artritis hasta 2 años después de la aparición de la enfermedad. Distribución geográfica: Hay focos endémicos de borreliosis de Lyme en áreas boscosas de Asia, noroeste, centro y este de Europa, y Estados Unidos de América. Riesgo para el viajero: Generalmente bajo. Están en riesgo quienes visitan zonas rurales en regiones endémicas, especialmente campistas y montañeros. Profilaxis: EE.UU. dispone de una vacuna que proporciona protección contra el serotipo específico endémico en dicho país. Precauciones: Evitar áreas infestadas por garrapatas y la exposición a las mismas. Si se produce una picadura, se debe extraer la garrapata tan pronto como sea posible.




Brucelosis
Transmisión: La brucelosis es en primer lugar una enfermedad que afecta a los animales. La infección se produce a partir de bovinos (Brucella abortus), perros (B. canis), cerdos (B. suis) u ovinos y caprinos (B. militensis), normalmente por contacto directo con animales infectados o por el consumo de leche o queso (crudos) no pasteurizados. Naturaleza de la enfermedad: Infección generalizada de aparición insidiosa, que provoca fiebre y malestar continuo o intermitente, que puede durar meses sino se trata adecuadamente. Las recaídas son comunes después del tratamiento. Distribución geográfica: En todo el mundo, en animales. Es más común en países en desarrollo y en la Región Mediterránea. Riesgo para el viajero: Bajo para la mayoría de los viajeros. Quienes visitan zonas rurales y agrícolas pueden correr un riesgo mayor. También existe riesgo en lugares donde se venden productos derivados de la leche sin pasteurizar cerca de centros turísticos. Profilaxis: Ninguna. Precauciones: Evitar el consumo de leche y productos lácteos no pasteurizados y el contacto directo con animales, especialmente bovinos, caprinos y ovinos.




Carbunco
Transmisión: Infección cutánea, la forma clínica más frecuente del carbunco se produce por contacto con productos contaminados de animales infectados (principalmente ganado caprino y ovino), tales como las prendas de piel o de lana, o a través del contacto con suelos que contienen esporas. Naturaleza de la enfermedad: Es una enfermedad de animales herbívoros que ocasionalmente provoca infección aguda en el hombre, generalmente afecta a la piel, como resultado del contacto con tejidos o productos contaminados de animales infectados o con esporas en el suelo. Las infecciones no tratadas pueden propagarse a los nódulos linfáticos regionales y a la corriente sanguínea, puede llegar a ser mortal. Distribución geográfica: Se producen casos esporádicos en animales en todo el mundo; hay brotes ocasionales en Asia Central. Riesgo para el viajero: Muy bajo para la mayoría de los viajeros. Profilaxis: Ninguna. (Se dispone de una vacuna para personas de alto riesgo por exposición ocupacional al B. anthracis; no está comercialmente disponible en la mayoría de los países.) Precauciones: Evitar el contacto directo con el suelo y con productos de origen animal, como souvenirs hechos de pieles de animales.




Cólera
Transmisión: Se produce infección a través de la ingestión de alimentos o agua contaminados directa o indirectamente por excrementos o vómitos de personas infectadas. El cólera afecta sólo a las personas. No existe insecto vector ni reservorio animal. Naturaleza de la enfermedad: Enfermedad entérica aguda de diversa gravedad. La mayoría de las infecciones son asintomáticas. En los casos leves, se produce diarrea sin otros síntomas. En los casos graves aparece bruscamente diarrea acuosa profusa con náuseas y vómitos, dando lugar a deshidratación. Si en un plazo de pocas horas no se instaura rápidamente el tratamiento, se puede producir la muerte por colapso circulatorio debido a la deshidratación. Distribución geográfica: El cólera se produce principalmente en países pobres con saneamientos inadecuados y carencia de agua de bebida limpia, y en países afectados por guerras y donde las infraestructuras pueden haber quedado destruidas. Muchos países en desarrollo están afectados, especialmente en África y Asia y, en menor medida, en países de América Central y del Sur. Riesgo para el viajero: Muy bajo para la mayoría de los viajeros, incluso en países donde ocurren epidemias de cólera. Los trabajadores de la ayuda humanitaria en zonas de desastre y en campamentos de refugiados se encuentran en riesgo. Profilaxis: En algunos países se dispone de vacunas orales contra el cólera para inmunizaciones a viajeros y grupos de riesgo ocupacional. Precauciones: Las mismas que para otras enfermedades diarreicas. Se deben adoptar todas las precauciones necesarias para evitar el consumo de alimentos, bebidas y agua de bebida potencialmente contaminados. El viajero debe llevar consigo sales de rehidratación oral para combatir la deshidratación en caso de diarrea severa.




Dengue
Transmisión: El dengue es transmitido por el mosquitos Aedes aegypti,, que pica durante las horas diurnas. No se produce transmisión directa de persona a persona. Los monos actúan como huésped reservorio en el Sudeste Asiático y en África Occidental. Naturaleza de la enfermedad: Puede presentarse de tres formas clínicas: La fiebre de dengue es una enfermedad febril aguda con aparición repentina de fiebre, seguida de síntomas generalizados y, en ocasiones, rash cutáneo macular. Es conocida como "fiebre rompehuesos ", por los severos dolores musculares. La fiebre puede ser bifásica (dos episodios u oleadas de fiebre separadas). La mayoría de los pacientes se recuperan pasados unos pocos días. La fiebre hemorrágica de dengue con una aparición aguda de fiebre seguida de otros síntomas como consecuencia de trombocitopenia, permeabilidad vascular incrementada y manifestaciones hemorrágicas. El síndrome de shock de dengue sobreviene en una pequeña proporción de casos, aparece hipotensión grave que requiere tratamiento médico urgente para corregir la hipovolemia. Sin un tratamiento apropiado, el 40-50% de los casos son mortales; con una terapia aplicada a tiempo, la tasa de mortalidad es del 1% o menos. Distribución geográfica: El dengue está extendido por regiones tropicales y subtropicales de América Central y del Sur, el Sudeste y Sur de Asia, así como en África; en estas regiones el dengue se limita a altitudes por debajo de 600 metros (2.000 pies). Riesgo para el viajero: Existe un riesgo significativo para los viajeros en áreas donde es endémico y en áreas afectadas por epidemias de dengue. Profilaxis: Ninguna. Precauciones: Los viajeros deben adoptar medidas para evitar las picaduras de mosquitos tanto durante el día como durante la noche, en aquellas zonas donde hay dengue.




Encefalitis Japonesa
Transmisión: El virus es transmitido por diferentes mosquitos del género Culex. Infecta a porcinos, aves salvajes, además de al hombre. Los mosquitos pueden hacerse infectivos después de alimentarse de aves o porcinos virémicos. Naturaleza de la enfermedad: La mayoría de las infecciones son asintomáticas. En los casos sintomáticos, la gravedad varía, las infecciones leves se caracterizan por dolor de cabeza con fiebre o meningitis aséptica. Los casos graves tienen una aparición y progresión rápida, con dolor de cabeza, fiebre alta y signos meníngeos. Son comunes las secuelas neurológicas permanentes entre los supervivientes. Aproximadamente el 50% de los casos clínicos graves tienen un resultado mortal. Distribución geográfica: La EJ ocurre en varios países de Asia y, ocasionalmente, en Northern Queensland. Riesgo para el viajero: Bajo para la mayoría de los viajeros. Quienes visitan áreas rurales y agrícolas en países endémicos, pueden exponerse al riesgo, especialmente durante epidemias de EJ. Profilaxis: Vacunación, si está justificada por la probabilidad de exposición. Precauciones: Evitar las picaduras de mosquitos.




Enfermedad Meningocócica
Transmisión: La Transmisión se produce por contacto directo de persona a persona, incluida la transmisión por aerosol y por las gotitas respiratorias de la nariz y la faringe de personas infectadas, pacientes o portadores asintomáticos. No existe un reservorio animal ni insecto vector. Naturaleza de la enfermedad: La mayoría de las infecciones no producen enfermedad clínica. Muchas personas infectadas se convierten en portadores asintomáticos siendo el reservorio y la fuente de infección para otros. En general, la susceptibilidad a la enfermedad meningocócica disminuye con la edad, aunque se produce un ligero incremento en los adolescentes y adultos jóvenes. La meningitis meningocócica cursa con la aparición repentina de intenso dolor de cabeza, fiebre, náuseas, vómitos, fotofobia y rigidez de nuca, además de diversas manifestaciones neurológicas. La enfermedad es mortal en el 5%-10% de los casos, aunque se instaure rápidamente tratamiento antimicrobiano en adecuadas instalaciones sanitarias. De los individuos que sobreviven, hasta el 20% sufren secuelas neurológicas permanentes. La septicemia meningocócica, cursa con una rápida diseminación de las bacterias por la corriente sanguínea, es la forma de enfermedad meningocócica menos común y se caracteriza por colapso circulatorio, rash cutáneo hemorrágico y una alta mortalidad. Distribución geográfica: Se producen casos esporádicos en todo el mundo. En las zonas templadas la mayoría ocurren en los meses de invierno. Hay brotes localizados en espacios cerrados donde conviven muchas personas (por ejemplo, residencias de estudiantes, cuarteles militares). En África Subsahariana, en una zona que se extiende a lo ancho del continente desde Senegal hasta Etiopía (el "cinturón de la meningitis" africano), tienen lugar grandes brotes y epidemias durante la estación seca (noviembre-junio). Riesgo para el viajero: Generalmente bajo. Sin embargo, el riesgo es considerable si los viajeros se encuentran en lugares masificados o si participan en grandes movimientos de población como peregrinaciones en el cinturón de la meningitis en el Sahel. Ocasionalmente, se producen brotes localizados en viajeros, normalmente adultos jóvenes en campamentos o residencias de estudiantes. Profilaxis: Se dispone de vacuna contra el N. meningitidis tipos A, C, Y y W-135. Precauciones: Evitar los espacios cerrados llenos de gente. Después de un contacto próximo con una persona afectada por una enfermedad meningocócica se debe solicitar consejo médico sobre una posible quimioprofilaxis.




Encefalitis por Garrapatas
Transmisión: A través de la picadura de garrapatas infectadas. No existe transmisión directa de persona a persona. Algunos virus similares, también transmitidos por garrapatas, infectan a animales como aves, ciervos (louping-ill, mal del brinco), roedores y ovinos. Naturaleza de la enfermedad: Cursa con una sintomatología similar a la gripe, con una segunda fase de fiebre en el 10% de los casos. La encefalitis se desarrolla durante la segunda fase y puede dar lugar a parálisis, secuelas permanentes o muerte. Distribución geográfica: Presente en grandes zonas de Europa, especialmente Austria, Estados Bálticos (Estonia, Letonia y Lituania), República Checa, Hungría y Federación Rusa. La enfermedad es estacional y ocurre principalmente durante los meses de verano en zonas rurales y boscosas hasta 1.000 metros de altitud. Riesgo para el viajero: En áreas endémicas durante los meses de verano el viajero se expone al riesgo cuando realiza excursiones o camping en zonas rurales o boscosas. Profilaxis: Está disponible una vacuna contra la encefalitis por garrapatas. Precauciones: Evitar las picaduras de garrapatas usando pantalones largos y calzado cerrado cuando se hace camping o excursionismo en áreas endémicas.




Enfermedades por Hantavirus
Transmisión: Los hantavirus son transportados por varias especies de roedores. La infección se produce por contacto directo con las heces, saliva u orina de roedores infectados o por inhalación del virus, a partir de los excrementos de roedores. Naturaleza de la enfermedad: Enfermedades virales agudas, en las que se daña el endotelio vascular produciendo incremento de la permeabilidad vascular, hipotensión, manifestaciones hemorrágicas y shock. La función renal alterada con oliguria es característica de la FHSR. En el SPH se produce distrés respiratorio causado por el edema pulmonar. El resultado es mortal en hasta el 15% de los casos de FHSR y hasta el 50% de los casos de SPH. Distribución geográfica: Mundial, en roedores. Riesgo para el viajero: Muy bajo para la mayoría de los viajeros. Sin embargo, estos pueden correr riesgo en cualquier entorno donde haya presente un gran número de roedores, al poder entrar en contacto con ellos. Profilaxis: Ninguna. Precauciones: Evitar la exposición a roedores y sus excrementos. Los viajeros de aventura, con mochila, campistas y viajeros con exposición profesional a roedores en zonas endémicas para hantavirus, deben adoptar precauciones para excluir a los roedores de las tiendas y otros alojamientos y para proteger todos los alimentos de posibles contaminaciones por roedores.




Esquistosomiasis (Bilharziasis)
Transmisión: La infección se adquiere por contacto con agua dulce que contiene larvas (cercarias) de los esquistosomas, que se han desarrollado en los caracoles. Las larvas están libres y penetran en la piel de las personas que nadan o vadean esas aguas. Los caracoles se infectan como resultado de la excreción de huevos en la orina o en las heces de los humanos. Naturaleza de la enfermedad: Afecciones crónicas en las que los esquistosomas adultos viven durante muchos años en las venas (mesentéricas o vesicales) del huésped, donde producen los huevos que ocasionan daño en los órganos donde se depositan. Los síntomas dependen de los principales órganos diana afectados por las diferentes especies, así el S. mansoni y el S. japonicum originan fundamenalmente signos y síntomas hepáticos e intestinales, y el S. haematobium produce disfunción urinaria. Las larvas de algunos esquistosomas de aves y otros animales pueden penetrar la piel del hombre y causar una dermatitis auto-limitada, conocida como "prurito de los nadadores". Estas larvas no son capaces de desarrollarse en el hombre. Distribución geográfica: El S. mansoni está presente en muchos países de África Subsahariana, y en la Península Arábiga, Brasil, Surinam y Venezuela. El S. japonicum se encuentra en China, partes de Indonesia y Filipinas (ya no en Japón). El S. haematobium existe en África Subsahariana y en zonas del Mediterráneo oriental. Riesgo para el viajero: En las zonas endémicas los viajeros se exponen al riesgo al nadar o vadear en aguas dulces. Profilaxis: Ninguna. Precauciones: Evitar el contacto directo (nadar o caminar en el agua) con agua dulce potencialmente contaminada en zonas endémicas. En caso de exposición accidental, secar enérgicamente la piel para reducir la penetración de las cercarias. Evitar beber, lavarse o lavar ropa en aguas que pueden contener cercarias. Se puede tratar el agua para eliminar o inactivar las cercarias usando filtros de papel, yodo o cloro.




Fiebre Amarilla
Transmisión: La fiebre amarilla en áreas urbanas y algunas rurales se transmite por la picadura de mosquitos Aedes aegypti infectivos y por otros mosquitos en los bosques de Sudamérica. El mosquito pica durante las horas del día. La transmisión se produce hasta 2.500 metros de altitud. El virus de la fiebre amarilla infecta a humanos y monos. En zonas de jungla y boscosas los monos son el principal reservorio de la infección, y los mosquitos llevan a cabo la transmisión de mono a mono. Los mosquitos infectivos pueden picar a humanos que entran en las zonas boscosas provocando normalmente casos esporádicos o pequeños brotes. En las áreas urbanas los monos no están implicados, y la infección se transmite entre humanos a través de los mosquitos. La introducción de la infección en zonas urbanas densamente pobladas puede provocar grandes epidemias de fiebre amarilla. En África es común una pauta intermedia de transmisión en las regiones de sabana húmeda. Los mosquitos infectan tanto a monos como a humanos, ocasionando brotes localizados. Naturaleza de la enfermedad: Aunque algunas infecciones son asintomáticas, la mayoría de ellas dan lugar a una enfermedad aguda caracterizada por dos fases. Inicialmente, aparece fiebre, dolor muscular, cefaleas, escalofríos, anorexia, náuseas y/o vómitos, a menudo con bradicardia. Aproximadamente el 15% de los pacientes después de algunos días progresan a una segunda fase, con reaparición de la fiebre, desarrollo de ictericia, dolor abdominal, vómitos y manifestaciones hemorrágicas; la mitad de estos pacientes mueren 10-14 días después del comienzo de la enfermedad. Distribución geográfica: El virus de la fiebre amarilla es endémico en algunas áreas tropicales de África, centro y sur de América. El número de epidemias ha aumentado desde principios de la década de los 80. Se considera que en algunos países existe riesgo de introducción de la fiebre amarilla debido a la presencia del vector y de huéspedes primates adecuados (incluida Asia, donde nunca se han registrado casos de fiebre amarilla). Riesgo para el viajero: Los viajeros están expuestos al riesgo en todas las zonas donde la fiebre amarilla es endémica. El riesgo es más alto si los visitantes entran en zonas de jungla y boscosas. Profilaxis: En algunos países la vacunación contra la fiebre amarilla es obligatoria para los visitantes. Precauciones: Evitar las picaduras de mosquitos durante el día, así como durante la noche.




Fiebres Hemorrágicas
Transmisión: La mayoría de los virus que causan fiebres hemorrágicas son transmitidos por mosquitos. Sin embargo, hasta ahora no se ha identificado ningún insecto vector para los virus Ébola o Marburg: estos virus se contraen por contacto directo con fluidos o secreciones corporales de pacientes infectados. La FHCC es transmitida por garrapatas. Los virus de la fiebre de Lassa son transportados por roedores y transmitidos por los excrementos, bien por aerosol o por contacto directo. La FVR se adquiere bien por picaduras de mosquitos o por contacto directo con sangre o tejidos de animales infectados (principalmente ovinos), incluido el consumo de leche no pasteurizada. Naturaleza de la enfermedad: Las fiebres hemorrágicas son infecciones virales agudas y graves, normalmente con aparición repentina de fiebre, malestar, dolor de cabeza y mialgia, seguidos de faringitis, vómitos, diarrea, rash cutáneo y manifestaciones hemorrágicas. El resultado es mortal en una gran proporción de los casos (más del 50%). Distribución geográfica: Se producen enfermedades de este grupo extensamente en las regiones tropicales y subtropicales. Las fiebres hemorrágicas de Ébola y Marburg y la fiebre de Lassa ocurren en África Subsahariana. La fiebre hemorrágica de Crimea-Congo se produce en las regiones esteparias de Europa Central, así como en África tropical y del sur. La FVR ocurre en África y recientemente se ha propagado a Arabia Saudí. Otras fiebres hemorrágicas virales se producen en América Central y del Sur. Riesgo para el viajero: Muy bajo para la mayoría de los viajeros. Sin embargo, los viajeros que visitan áreas rurales o de bosques, pueden exponerse a la infección. Profilaxis: Ninguna (excepto para la fiebre amarilla). Precauciones: Evitar la exposición a mosquitos y garrapatas y el contacto con roedores.




Fiebre Tifoidea
Transmisión: La infección se transmite por el consumo de alimentos o agua contaminados. En ocasiones se produce transmisión fecal-oral directa. El marisco recogido en fondos contaminados por aguas residuales, constituye una importante fuente de infección. La infección se produce al comer fruta o verdura fertilizadas con excrementos humanos, al tomarlas crudas, así como por leche y productos lácteos que han sido contaminados. Las moscas pueden transferir la infección a los alimentos, causando una contaminación que puede ser suficiente para causar infección humana. La contaminación de los suministros de agua puede producir epidemias de fiebre tifoidea cuando un gran número de personas utilizan la misma fuente. Naturaleza de la enfermedad: Enfermedad sistémica de diversa gravedad. Los casos graves se caracterizan por la aparición gradual de fiebre, dolor de cabeza, malestar, anorexia e insomnio. El estreñimiento es más común que la diarrea en adultos y niños mayores. Sin tratamiento, la enfermedad progresa con fiebre sostenida, bradicardia, hepatoesplenomegalia, síntomas abdominales y, en algunos casos, neumonía. En pacientes de piel clara, aparecen puntos rosas (pápulas), que desaparecen con la presión, sobre la piel del tronco en hasta el 50% de los casos. En la tercera semana los casos no tratados desarrollan nuevas complicaciones gastrointestinales o de otro tipo, que pueden llegar a ser mortales. Alrededor del 2%-5% se convierten en portadores crónicos ya que la bacteria persiste en el tracto biliar aunque hayan desaparecido los síntomas. Distribución geográfica: Mundial. La enfermedad ocurre comúnmente en asociación con malas condiciones higiénicas para la preparación y manipulación de los alimentos, y donde no se realiza una eliminación sanitaria de las aguas residuales. Riesgo para el viajero: Riesgo generalmente bajo para los viajeros, excepto en zonas del norte y oeste de África, sur de Asia y Perú. Los viajeros tienen riesgo sólo si se exponen a niveles bajos de higiene con relación a la manipulación de los alimentos, el control de la calidad del agua de bebida y la eliminación de las aguas residuales. Profilaxis: Vacunación. Precauciones: Adoptar todas las precauciones necesarias frente a la exposición a infecciones transmitidas por los alimentos y el agua.




Filariasis
Transmisión: La Filariasis Linfática se transmite por la picadura de mosquitos infectados, que inyectan formas larvales del nematodo mientras están "chupando sangre". La oncocercosis se transmite por la picadura de moscas del género Simulium. Naturaleza de la enfermedad: La Filariasis Linfática es una enfermedad parasitaria crónica en la cual las filarias adultas habitan en los vasos linfáticos, lanzando microfilarias al torrente circulatorio. Las manifestaciones típicas en los casos sintomáticos incluyen fiebre, linfadenitis y linfangitis retrógrada. La Oncocercosis es una enfermedad parasitaria crónica que se produce principalmente en Africa Occidental Subsahariana, se encuentran gusanos adultos en nódulos fibrosos bajo la piel. Estos descargan microfilarios, que emigran a través de la piel, provocando dermatitis, llegan al ojo y ocasionan daños que conducen a la ceguera. Distribución geográfica: La Filariasis Linfática ocurre en toda el África Subsahariana y en gran parte del Sudeste Asiático. La Oncocercosis se produce principalmente en África Occidental, Central y también en América Central y del Sur. Riesgo para el viajero: Generalmente bajo, a menos que el viaje conlleve una gran exposición a los vectores en zonas endémicas. Profilaxis: Ninguna. Precauciones: Evitar la exposición a picaduras de mosquitos y/o moscas en las zonas endémicas.




Giardiasis
Transmisión: La infección normalmente se produce por la ingestión de quistes de Giardia presentes en el agua (incluida tanto el agua de bebida como las aguas recreativas no filtradas) contaminada por heces de humanos o animales infectados. Naturaleza de la enfermedad: Muchas infecciones son asintomáticas. Cuando se producen síntomas, son principalmente intestinales, caracterizados por anorexia, diarrea crónica, retortijones abdominales, meteorismo, heces frecuentes grasas, fatiga y pérdida de peso. Distribución geográfica: Mundial. Riesgo para el viajero: Riesgo significativo para los viajeros en contacto con aguas recreativas utilizadas por animales salvajes o con aguas no filtradas en piscinas. Profilaxis: Ninguna. Precauciones: Evitar la ingestión de cualquier tipo de agua de bebida o aguas recreativas potencialmente contaminadas (es decir, no filtradas).




Gripe
Transmisión: La transmisión del virus de la gripe por el aire se produce especialmente en espacios cerrados y llenos de gente. También se produce transmisión por contacto directo con las gotitas en aerosol diseminadas por toses y estornudos sin protección y por contaminación de las manos. Naturaleza de la enfermedad: Infección respiratoria aguda de diversa gravedad, que va desde una infección asintomática hasta una enfermedad mortal. Entre los síntomas iniciales se incluye fiebre de rápida aparición, dolor de garganta, tos y escalofríos, a menudo acompañados de cefaleas, rinitis, mialgias y postración. Pueden aparecer complicaciones como neumonías virales o más frecuentemente bacterianas. La enfermedad tiende a ser más grave en personas mayores y en niños pequeños. Las muertes causadas por la gripe se producen principalmente en las personas mayores e individuos con enfermedades crónicas pre-existentes. Distribución geográfica: Mundial. En regiones templadas la gripe es una enfermedad estacional que ocurre en invierno: afecta al hemisferio norte de noviembre a marzo y al hemisferio sur de abril a septiembre. En zonas tropicales no existe una pauta estacional clara y puede aparecer en cualquier momento del año. Riesgo para el viajero: Los viajeros, al igual que los residentes locales, se exponen al riesgo en cualquier país durante la estación de la gripe. Los viajeros que visitan países en el hemisferio opuesto durante la estación de la gripe corren un riesgo especial, sobre todo sino han creado algún nivel de inmunidad mediante la vacunación regular. Las personas mayores, personas con enfermedades crónicas previas y niños pequeños son más susceptibles. Profilaxis: Vacunación antes de que empiece la estación de la gripe. Sin embargo, la vacuna para los viajeros al hemisferio opuesto no es fácil de conseguir antes de llegar al destino del viaje. Para los viajeros de los grupos con mayor riesgo de gripe grave y complicada que no han sido o no han podido vacunarse, está indicado el uso de medicamentos antivirales como zanamivir u oseltamivir, allí donde están disponibles. También se puede considerar el uso de amantidine y rimantidine. Precauciones: Siempre que sea posible, se deben evitar los lugares cerrados y llenos de gente, así como el contacto cercano con personas que sufren infecciones respiratorias agudas.




Hepatitis A
Transmisión: El virus se transmite directamente a través de personas infectadas por vía fecal-oral, por contacto próximo o por el consumo de agua o alimentos contaminados. No hay insecto vector ni reservorio animal (aunque algunos primates no humanos a veces están infectados). Naturaleza de la enfermedad: La hepatitis viral aguda cursa con aparición brusca de fiebre, malestar, náuseas y trastornos abdominales, seguido de ictericia unos días después. La infección en niños muy pequeños normalmente es leve o asintomática. Los niños mayores tienen riesgo de enfermedad sintomática. La enfermedad es más grave en adultos, dura varias semanas y la recuperación varios meses; la tasa de mortalidad por casos es superior al 2% en personas mayores de 40 años, y del 4% en mayores de 60 años. Distribución geográfica: Mundial, pero es más habitual allí donde las condiciones sanitarias son deficientes y la seguridad del agua de bebida no está bien controlada. Riesgo para el viajero: Los viajeros no inmunes que van a países en desarrollo corren un riesgo significativo de infección. El riesgo es especialmente alto para los viajeros expuestos a deficientes condiciones de higiene, saneamiento y control del agua de bebida. Profilaxis: Vacunación. Precauciones: Los viajeros que no son inmunes a la hepatitis A (es decir, que nunca han tenido la enfermedad ni se han vacunado) deben tener un cuidado especial para evitar los alimentos y bebidas potencialmente contaminados.




Hepatitis B
Transmisión: La infección se transmite de persona a persona por contacto con fluidos corporales infectados. El contacto sexual es una forma de transmisión importante, aunque la infección también se transmite por transfusión de sangre o hemoderivados contaminados, o por el uso de agujas o jeringuillas contaminadas. También existe riesgo potencial de transmisión por otros mecanismos que penetran la piel, incluida la acupuntura, piercing y tatuajes. Puede ocurrir transmisión perinatal de la madre a su hijo. No existe insecto vector ni reservorio animal. Naturaleza de la enfermedad: Muchas infecciones por el VHB son asintomáticas o producen síntomas leves, que a menudo no son reconocidos en los adultos. Cuando la infección da clínica, ésta tiene una aparición gradual, con anorexia, trastornos abdominales, náuseas, vómitos, artralgia y rash, seguido en algunos casos de ictericia. En los adultos, aproximadamente el 1% de los casos son mortales. La infección crónica por el VHB puede persistir en una cierta proporción de los casos, desarrollando más adelante alguno de ellos cirrosis y/o cáncer hepático. Distribución geográfica: Mundial, aunque con niveles diferentes de endemicidad. En Norteamérica, Australia, Europa del Norte y Occidental, la pervalencia de la infección crónica por el VHB es relativamente baja (menos del 2% de la población general). Riesgo para el viajero: Insignificante para las personas vacunadas contra la hepatitis B. Los viajeros no vacunados corren riesgo si tienen relaciones sexuales sin protección o usan agujas o jeringuillas contaminadas para inyecciones, acupuntura, piercing o tatuajes. Un accidente o emergencia médica que requiera transfusión de sangre puede causar una infección si la sangre no ha sido analizada para detectar el VHB. Los viajeros dedicados a actividades de ayuda humanitaria pueden exponerse a sangre u otros fluidos corporales infectados en los centros de asistencia sanitaria. Profilaxis: Vacunación. Precauciones: Adoptar prácticas sexuales seguras y evitar el uso de cualquier instrumento potencialmente contaminado para inyecciones u otras actividades que perforen la piel.




Hepatitis C
Transmisión: El virus se adquiere por transmisión de persona a persona a través de vías parenterales. Antes de que se dispusiera de una prueba para la detección del VHC, la infección se transmitía principalmente por transfusiones de sangre o hemoderivados infectados. Actualmente la transmisión ocurre con frecuencia por el uso de agujas, jeringuillas y otros instrumentos contaminados usados para inyecciones y otros procedimientos que perforan la piel. La transmisión sexual de la hepatitis C ocurre raramente. No existe insecto vector ni reservorio animal para el VHC. Naturaleza de la enfermedad: La mayoría de las infecciones por VHC son asintomáticas. Si aparece clínica los síntomas normalmente son graduales, con anorexia, molestias abdominales, náuseas y vómitos, seguidos por el desarrollo de ictericia en algunos casos (menos común que en la hepatitis B). La mayoría de los pacientes afectados desarrollan una infección crónica de larga duración que puede conducir a cirrosis y/o cáncer hepático. Distribución geográfica: Mundial, con diferencias regionales en los niveles de prevalencia. Riesgo para el viajero: Los viajeros se exponen al riesgo si practican conductas inseguras que implican el uso de agujas o jeringuillas contaminadas para inyecciones, acupuntura, piercing o tatuajes. Puede adquirirse la enfermedad si tras un accidente o emergencia médica se requiere una transfusión de sangre que no ha sido sometida a análisis para la detección del VHC. Los viajeros dedicados a actividades de ayuda humanitaria pueden exponerse a través de sangre u otros fluidos corporales infectados, en centros de atención sanitaria. Profilaxis: Ninguna. Precauciones: Adoptar prácticas sexuales seguras y evitar el uso de cualquier instrumento potencialmente contaminado para inyecciones u otros procedimientos que perforen la piel.




Hepatitis E
Transmisión: La hepatitis E es una enfermedad que se transmite a través del agua, normalmente se contrae por agua de bebida contaminada. También es posible la transmisión fecal-oral de persona a persona. No existe ningún insecto vector. Se sospecha, aunque no está demostrado, que la hepatitis E puede tener un reservorio animal doméstico, como pueden ser los cerdos. Naturaleza de la enfermedad: Las características clínicas y el curso de la enfermedad son en general similares a los de la hepatitis A. Al igual que en la hepatitis A, no existe fase crónica. Los adultos jóvenes son los más afectados. Existe una importante diferencia para las mujeres embarazadas entre la hepatitis E y la hepatitis A: durante el tercer trimestre del embarazo, la hepatitis E adopta una forma muchos más grave con una tasa de letalidad que llega al 20%. Distribución geográfica: Mundial. La mayoría de los casos, tanto esporádicos como epidémico se producen en países con bajos niveles de higiene y saneamientos. Riesgo para el viajero: Los viajeros que visitan países en desarrollo pueden correr riesgo cuando se exponen a malas condiciones de saneamiento y de control del agua de bebida. Profilaxis: Ninguna. Precauciones: Los viajeros deben adoptar las precauciones generales para evitar alimentos y agua de bebida potencialmente contaminados.




Legionelosis
Transmisión: La infección es consecuencia de la inhalación de sprays o vapores de agua. Las bacterias viven en el agua y colonizan los sistemas de agua caliente a temperaturas de 20°-50 °C (óptima 35°-46 °C). Contaminan las torres de enfriamiento del aire acondicionado, sistemas de agua caliente, humidificadores, hidromasajes y otros aparatos que contienen agua. No se produce transmisión de persona a persona. Naturaleza de la enfermedad: La legionelosis adopta dos formas clínicas diferentes: La enfermedad del legionario es una neumonía bacteriana aguda que cursa con rápida aparición de anorexia, malestar, mialgia, dolor de cabeza y fiebre que asciende rápidamente, dando lugar a neumonía, que puede terminar en fracaso respiratorio y muerte. La fiebre Pontiac es un trastorno similar a la gripe, con recuperación espontánea pasados 2-5 días. La susceptibilidad a la legionelosis aumenta con la edad, especialmente en fumadores y personas con enfermedades pulmonares crónicas pre-existentes u otras condiciones con compromiso inmunitario. Distribución geográfica: Mundial. Riesgo para el viajero: Generalmente bajo. Se producen brotes ocasionales por la diseminación de la infección a través de aguas o sistemas de aire acondicionado contaminados en hoteles y otras instalaciones usadas por visitantes. Profilaxis: Ninguna. La prevención de la infección depende de la limpieza y desinfección regular de los posibles orígenes. Precauciones: Ninguna.




Leishmaniasis
Transmisión: La infección se transmite por la picadura de flebotomos hembras infectantes a persona o animales infectados. Los perros, roedores y otros mamíferos son huéspedes reservorios de la leishmaniasis. También es posible la transmisión de persona a persona por sangre inyectada o jeringuillas y agujas contaminadas. Naturaleza de la enfermedad: La leishmaniasis se produce en dos formas principales: La leishmaniasis cutánea y mucocutánea (espundia) origina llagas en la piel y úlceras crónicas de las mucosas. La leishmaniasis cutánea es una enfermedad crónica, progresiva, incapacitante y a menudo mutiladora. La leishmaniasis visceral (kala-azar) afecta a la médula ósea, hígado, bazo, nódulos linfáticos y otros órganos internos. Normalmente es mortal si no se trata. Distribución geográfica: Muchos países de regiones tropicales y subtropicales, incluida África, partes de América central y del sur, Asia, Europa meridional y Mediterráneo este. Más del 90% de todos los casos de leishmaniasis visceral ocurren en Bangladesh, Brasil, India, Nepal y Sudán. Más del 90% de los todos los casos de leishmaniasis cutánea se producen en Afganistán, Argelia, Brasil, República Islámica de Irán, Arabia Saudí y República Árabe Siria. Riesgo para el viajero: Generalmente bajo. Los visitantes de zonas rurales y de bosques en países endémicos tienen cierto riesgo. Profilaxis: Ninguna. Precauciones: Evitar las picaduras de flebotomos especialmente después de anochecer, usando repelentes y mosquiteras impregnadas de insecticidas sobre las camas. La picadura deja una pápula roja sin inflamación, que puede alertar al viajero sobre su causa.




Leptospirosis
Transmisión: La infección se produce por contacto de la piel (especialmente si está excoriada) o membranas mucosas con agua, terrenos húmedos o vegetación contaminados con la orina de animales infectados, principalmente ratas. En ocasiones la infección puede ser consecuencia del contacto directo con orina o tejidos de animales infectados, o por la ingestión de alimentos contaminados por la orina de ratas infectadas. Naturaleza de la enfermedad: Las infecciones leptospirales adoptan formas clínicas diferentes, normalmente con la aparición repentina de fiebre, dolor de cabeza, mialgia, escalofríos, sufusión conjuntival y rash cutáneo. La enfermedad puede dar lugar a meningitis, anemia hemolítica, ictericia, manifestaciones hemorrágicas y otras complicaciones, incluido el fracaso hepato-renal. Distribución geográfica: Mundial. Más común en países tropicales. Riesgo para el viajero: Bajo para la mayoría de los viajeros. Existe riesgo ocupacional para los granjeros dedicados a la producción de arroz y caña de azúcar. Los visitantes de zonas rurales y en contacto con agua de canales, lagos y ríos pueden estar expuestos a la infección. Existe un riesgo mayor después de inundaciones recientes. Las personas que practican canoa, kayac u otras actividades en el agua pueden tener más riesgo. Profilaxis: Ninguna. Se dispone de vacuna contra cepas locales para trabajadores en lugares donde la enfermedad constituye un riesgo ocupacional, pero no está comercialmente disponible en la mayor parte de los países. Precauciones: Evitar nadar o vadear en aguas potencialmente contaminadas incluidos canales, estanques, ríos, arroyos y pantanos. Evitar todo contacto directo o indirecto con roedores.




Listeriosis
Transmisión: La listeriosis afecta a diversos animales. La infección alimentaria en humanos se produce por el consumo de alimentos contaminados, especialmente leche no pasteurizada, quesos frescos, verduras y productos cárnicos preparados, como patés. La listeria se multiplica rápidamente en los alimentos refrigerados que han sido contaminados, a diferencia de la mayor parte de los patógenos de origen alimentario. La transmisión también se produce de la madre al feto o durante el parto. Naturaleza de la enfermedad: La listeriosis causa menigoencefalitis y/o septicemia en adultos y recién nacidos. En mujeres embarazadas provoca fiebre y abortos. Los niños recién nacidos, mujeres embarazadas, personas mayores e individuos inmunocomprometidos son especialmente susceptibles a la listeriosis. En otras personas, la enfermedad puede limitarse a un leve episodio febril agudo. En mujeres embarazadas la Transmisión de la infección al feto puede provocar mortinatos, septicemia en el parto o meningitis neonatal. Distribución geográfica: Mundial, con incidencia esporádica. Riesgo para el viajero: Generalmente bajo. El riesgo se incrementa por el consumo de leche y productos lácteos no pasteurizados y productos cárnicos preparados. Profilaxis: Ninguna. Precauciones: Evitar el consumo de leche y productos lácteos no pasteurizados. Las mujeres embarazadas e individuos inmunocomprometidos deben adoptar estrictas precauciones para evitar la infección por listeria y otros patógenos transmitidos por los alimentos.




Meningitis por Haemophilus
Transmisión: Contacto directo con una persona infectada (normalmente niños). Naturaleza de la enfermedad: El Hib provoca meningitis en bebés y niños pequeños; también puede causar epiglotitis, osteomielitis, neumonía, sepsis y artritis séptica. Distribución geográfica: Mundial. La enfermedad causada por el Hib es más frecuente en países donde se utiliza la vacunación contra el Hib. En los países donde se aplica la vacunación infantil rutinaria prácticamente ha desaparecido. Riesgo para el viajero: Riesgo para los niños no vacunados que viajan a países donde no se aplica la vacunación contra el Hib y donde, por lo tanto, es probable que la infección sea más común. Profilaxis: Vacunación de los niños. Precauciones: Ninguna.




Peste
Transmisión: La peste es una enfermedad zoonótica que afecta a roedores y a sus pulgas, que transmiten la infección a otros animales y al hombre. No se produce transmisión directa de persona a persona excepto en el caso de la peste neumónica, en la que gotitas respiratoria pueden transferir la infección a otros por contacto cercano. Naturaleza de la enfermedad: La peste adopta tres formas clínicas principales: La peste bubónica generalmente es consecuencia de la picadura de pulgas infectadas. Se desarrolla linfadenitis en los nódulos linfáticos, siendo los regionales los más frecuentemente afectados. La hinchazón, dolor y supuración de los nódulos linfáticos producen los característicos bubones de la peste. La peste septicémica puede desarrollarse a partir de la peste bubónica o bien ocurrir en ausencia de linfadenitis. La diseminación de la infección por la corriente sanguínea da lugar a meningitis, shock endotóxico y coagulación intravascular diseminada. La peste neumónica puede ser consecuencia de una infección secundaria de los pulmones tras la diseminación de los bacilos desde otros lugares del organismo. Produce neumonía severa. Puede ocurrir Transmisión directa de persona a persona a través de gotitas respiratorias, que provocan peste pulmonar primaria en los receptores. Sin un tratamiento inmediato y efectivo, el 50%-60% de los casos de peste bubónica son mortales, mientras que la peste septicémica y neumónica no tratadas son invariablemente mortales. Distribución geográfica: Existen focos naturales de peste en los roedores en muchas partes del mundo. Está presente en roedores salvajes en el centro, este y sur de África, Sudamérica, la parte oeste de Norteamérica y grandes zonas de Asia. En algunas áreas es frecuente el contacto entre ratas salvajes y domésticas, lo que da lugar a casos esporádicos de peste humana y en ocasiones a brotes. Riesgo para el viajero: Generalmente bajo. Sin embargo, los viajeros que van a zonas rurales en regiones endémicas a la peste pueden exponerse al riesgo, especialmente si practican camping o caza, o si tienen contacto con roedores. Profilaxis: Se dispone de una vacuna efectiva contra la peste bubónica exclusivamente para personas con alta exposición ocupacional; no está comercialmente disponible en la mayor parte de los países. Precauciones: Evitar cualquier contacto con roedores vivos o muertos.




Rabia
Transmisión: La rabia es una enfermedad zoonótica que afecta a muy diversos animales domésticos y salvajes, incluido el murciélago. La infección en humanos normalmente se produce por la mordedura de un animal infectado. El virus está presente en la saliva. Cualquier otro contacto que implique perforación de la piel ocurrido en un lugar donde está presente la rabia, debe ser tratado con precaución. En los países desarrollados la transmisión se produce normalmente a través de los perros. No se ha documentado transmisión de persona a persona. Naturaleza de la enfermedad: Esta encefalomielitis vírica aguda, casi siempre es mortal. Incialmente cursa con sensación de angustia, cefaleas, fiebre, malestar y cambios sensitivos alrededor del lugar de la mordedura del animal. Son frecuetes síntomas como excitabilidad, alucinaciones y aerofobia, seguidos, en algunos casos, de miedo al agua (hidrofobia) por espasmos de los músculos de la deglución, progresión a delirio, convulsiones y la muerte que sobreviene en pocos días. Una forma menos frecuente, la rabia paralítica, se caracteriza por pérdida de sensaciones, debilidad, dolor y parálisis. Distribución geográfica: La rabia está presente en animales en muchos países de todo el mundo. En las personas la mayoría de los casos se producen en países en desarrollo. Riesgo para el viajero: El viajero puede estar expuesto al riesgo si hay contacto con animales tanto salvajes como domésticos, incluidos perros y gatos en las zonas endémicas. Profilaxis: Vacunación de los viajeros si hay riesgo significativo previsible de exposición a la rabia o que los desplazamientos se realicen a áreas hiperendémicas, donde puede no estar disponible la vacuna contra la rabia. Precauciones : En las áreas endémicas a la rabia evitar el contacto con animales salvajes y animales domésticos callejeros, especialmente perros y gatos. Si se es mordido por un animal potencialmente infectado, o después de cualquier otro contacto sospechoso, se debe limpiar inmediatamente y por completo la herida con agua o agua y jabón o detergente. Se debe buscar asistencia médica urgentemente. El estado de vacunación del animal implicado no debe ser un criterio para prescindir del tratamiento post-exposición, a menos que se haya documentado perfectamente su vacunación con una vacuna conocida. En el caso de los animales domésticos se debe mantener al animal sospechoso bajo observación durante un período de 10 días. Tratamiento post-exposición de la rabia: En zonas endémicas a la rabia, las circunstancias que rodean la acción de la mordedura de un animal, cualquier tipo de contacto con el animal, así como la conducta y apariencia del mismo, pueden sugerir que el animal está rabioso. En esas situaciones se debe obtener consejo médico inmediatamente. Para evitar que se establezca la infección por rabia se requiere aplicar un tratamiento de primeros auxilios sobre la herida, seguido de la administración de la vacuna contra la rabia y de inmunoglobulina antirrábica en caso de exposición clase 3. La administración de la vacuna, y de inmunoglobulina en caso necesario, debe ser realizada o supervisada directamente por un médico. El tratamiento post-exposición que depende del tipo de contacto con el presunto o confirmado animal rabioso, se indica a continuación: Tipo de contacto (clase de exposición) y Tratamiento recomendado: Tocar o alimentar a animales , Lametones sobre la piel . Tratamiento recomendado : Ninguno. Mordisqueo sin herir la piel , Pequeños arañazos sin sangrado , Lametones sobre piel con heridas abiertas . Tratamiento recomendado : Administrar la vacuna inmediatamente (Se puede suspender el tratamiento si se comprueba, mediante los adecuados exámenes de laboratorio, que el animal sospechoso está libre de la rabia o, en el caso de perros y gatos domésticos, si el animal sigue estando sano durante un período de observación de 10 días.). Mordiscos o arañazos simples o múltiples con ruptura de la piel , Contaminación de membrana mucosa por saliva de lametones . Tratamiento recomendado : Administrar inmunoglobulina y vacuna antirrábicas inmediatamente. Tratamiento de primeros auxilios. Dado que la eliminación del virus de la rabia del lugar de la infección por medios químicos o físicos es el mecanismo de protección más efectivo, es imperativo realizar inmediatamente un enérgico lavado y enjuagado con jabón o detergente y agua, o agua sola. Después del lavado, se aplicará etanol (70%) o tintura o solución acuosa de yodo o povidona yodada. Tratamiento específico: La inmunoglobulina antirrábica humana (IGRH) se aplica por instilación en la profundidad de la herida y por infiltración en el tejido adyacente. Se debe instilar en la herida tanta cantidad como sea posible del volumen total de IGRH requerido. La vacuna (Las vacunas contra la rabia preparadas con virus de la rabia en cultivo celular o derivados de embriones de pato purificados e inactivados, están reemplazando a las vacunas antiguas producidas sobre cultivo cerebral), se aplica por vía intradérmica o intramuscular en tratamientos que requieren varias dosis (4 ó 5 dosis por vía intramuscular, dependiendo de la vacuna), administrando la primera dosis tan pronto como sea posible tras la exposición, y la última dosis en un plazo de 28 días para la vacunación intramuscular, o de 90 días para la vacunación intradérmica. A los pacientes que han sido vacunados profilácticamente contra la rabia con una dosis completa de la vacuna de células diploides humanas o de embrión de pato, se les puede administrar un tratamiento post-exposición más breve con menos dosis; no necesitan IGRH. Sigue siendo esencial el tratamiento urgente post-exposición tanto si la persona ha sido como si no ha sido vacunada previamente.


Sras (Síndrome Respiratorio Agudo Sever
Transmisión: En 2003 una epidemia de SRAS afectó a 26 países y provocó más de 8.000 casos. Desde entonces se ha producido un pequeño número de casos como consecuencia de accidentes de laboratorio o por transmisión de animal a persona (Guangdong, China). La transmisión del SARS-CoV se produce principalmente de persona a persona. El SARS-CoV habitualmente se propaga cuando los casos sintomáticos de SRAS tosen o estornudan expulsando secreciones respiratorias infectadas, bien directamente hacia las membranas mucosas (ojos, nariz o boca) de otras personas o sobre superficies próximas en las cuales el virus puede persistir durante varios días si no se limpian. La transmisión del SARS-CoV ocurre sobre todo durante la segunda semana de la enfermedad, lo que corresponde al pico de excreción del virus en secreciones respiratorias y heces y cuando los casos con enfermedad severa comienzan a deteriorarse clínicamente. Naturaleza de la enfermedad: Los síntomas iniciales son similares a los de la gripe e incluyen fiebre, malestar, dolores musculares (mialgia), cefalea y escalofríos. No se ha encontrado ningún síntoma individual o conjunto de síntomas específicos para el diagnóstico del SRAS. Aunque la fiebre es el síntoma notificado con mayor frecuencia, puede estar ausente en un primer momento. La tos (inicialmente seca), las dificultades respiratorias y la diarrea pueden estar presentes en la primera semana aunque habitualmente ocurren en la segunda. Los casos graves evolucionan rápidamente a distrés respiratorio y requieren cuidados intensivos. Hasta el 70% de los casos de SRAS desarrollan diarrea acuosa y profusa sin sangre ni mucosidad. Distribución geográfica: La distribución se basa en la epidemia de 2002-2003. La enfermedad apareció en noviembre de 2002 en la provincia de Guangdong al sur de China. Esta región se considera una zona potencial de reemergencia del SARS-CoV. Otros países/áreas donde se produjo transmisión de persona a persona, tras una inicial importación de casos fueron la Región Administrativa Especial de Hong Kong y Taiwán (ambos en China), Toronto (Canadá), Singapur y Hanoi (Vietnam). En otros países los casos importados no dieron lugar a brotes locales. Riesgo para el viajero: Actualmente, ninguna zona del mundo está notificando transmisión del SRAS de persona a persona. Desde que terminó la epidemia global en julio de 2003, se han notificado 6 casos de SRAS en todo el mundo, 2 causados por accidentes de laboratorio (Singapur y Taiwán) y 4 en el sur de China; en este último el origen de la infección sigue sin determinarse aunque existen evidencias circunstanciales de transmisión de animal a persona. Si el SRAS reemerge en forma epidémica la OMS publicará recomendaciones sobre el riesgo de viajar a las áreas afectadas. Los viajeros deben mantenerse informados sobre las recomendaciones actualizadas con relación a los viajes. Sin embargo, incluso durante la etapa más intensa de la epidemia de 2003, el riesgo global de transmisión del SRAS-CoV a los viajeros fue bajo. Profilaxis: Ninguna. Precauciones: Seguir las recomendaciones sobre los viajes publicadas por la OMS. Lavarse las manos con frecuencia.




Tripanosomiasis Africana
Transmisión: Por la picadura de moscas tse-tse infectadas. Los humanos son el principal reservorio del T. b. gambiense. Los bovinos domésticos y animales salvajes, incluidos los antílopes, son el principal reservorio animal del T. b. rhodesiense. Naturaleza de la enfermedad: El T. b. gambiense da lugar a una enfermedad crónica con aparición de síntomas tras un prolongado período de semanas o meses. El T. b. rhodesiense cursa de forma más aguda, aparece pocos días o semanas después de la picadura infecciosa; a menudo existe un chancro en el sitio de la picadura primaria. Las manifestaciones clínicas iniciales incluyen cefaleas intensas, insomnio, linfaadenomegalia, anemia y rash. En el último estadio se produce una pérdida de peso progresiva y signos de invasión del sistema nervioso central. La enfermedad es mortal si no se trata. Distribución geográfica: El T. b. gambiense está presente en focos en países tropicales del centro y oeste de África. El T. b. rhodesiense existe en el este de África, se extiende al sur hasta Botswana. Riesgo para el viajero: Los viajeros tienen riesgo de exposición en regiones endémicas si visitan zonas rurales para cazar, pescar, al realizar safaris, navegar u otras actividades en zonas remotas. Profilaxis: Ninguna. Precauciones: Los viajeros deben ser conscientes del riesgo en las zonas endémicas y evitar, en la medida de lo posible, cualquier contacto con moscas tse-tse. Sin embargo, es difícil evitar las picaduras ya que pican a través de la ropa. Los viajeros deben ser advertidos de que las moscas tse-tse pican durante el día y los repelentes de insectos disponibles no son efectivos. La picadura dolorosa ayuda a identificar su origen, el viajero debe buscar atención médica inmediata si desarrolla síntomas posteriormente.




Tripanosomiasis Americana
Transmisión: La infección se transmite por insectos triatomineos hematófagos. Mientras se alimentan al succionar la sangre, los insectos infectados excretan con sus heces tripanosomas, pudiendo contaminar la conjuntiva, membranas mucosas, abrasiones o heridas en la piel, incluida la herida de la picadura. También se produce Transmisión a través de transfusiones de sangre si la sangre se ha obtenido de un donante infectado. Es posible la infección congénita, ya que los parásitos atraviesan la barrera placentaria. El T. cruzi además de a los humanos infecta a muchas especies de animales salvajes y domésticos. Naturaleza de la enfermedad: En adultos, el T. cruzi produce una enfermedad crónica con daño progresivo del miocárdico, arritmias, dilatación cardiaca, así como afección de las vías gastronintestinales con mega-esófago y megacolon. En los niños el T. cruzi produce una enfermedad aguda, seguida de manifestaciones clínicas crónicas que aparecen en etapas ulteriores de la vida. Distribución geográfica: Existe tripanosomiasis americana en Méjico, en América central y del sur (hasta Argentina central y Chile). El vector se encuentra principalmente en áreas rurales donde vive en las paredes de las viviendas de pobre construcción. Riesgo para el viajero: En las zonas endémicas, los viajeros están expuestos a riesgo cuando practican trekking, camping o utilizan viviendas de mala calidad. Precauciones: Evitar la exposición a insectos hematófagos. Se puede reducir la exposición usando mosquiteras sobre las camas en las viviendas y campamentos, así como el uso de insecticidas residuales en las viviendas.




Tuberculosis
Transmisión: La infección normalmente se produce por transmisión aérea directa de persona a persona. Naturaleza de la enfermedad: La exposición al Mycobacterium tuberculosis puede originar infección, aunque la mayoría de las infecciones no causan la enfermedad. El riesgo de desarrollar la enfermedad tras la infección es, en general, del 5%-10% durante toda la vida, pero puede aumentar por diversos factores, especialmente la inmunosupresión (por infección por VIH avanzada). La resistencia a múltiples fármacos se refiere a cepas de M. tuberculosis resistentes al menos a isoniazida y rifampicina. Las cepas resistentes no se diferencian de otras cepas en su infecciosidad, probabilidad de causar enfermedad o efectos clínicos generales; sin embargo, si son las causantes de la enfermedad el tratamiento es más difícil y el riesgo de muerte es más elevado. Distribución geográfica: Mundial. El riesgo de infección difiere entre los países, como se muestra en el mapa de la incidencia estimada de la TB. Riesgo para el viajero: Riesgo bajo para la mayoría de los viajeros. Los viajeros con estancias superiores a más de 3 meses a países con una incidencia más alta de tuberculosis que la de su propio país, pueden tener un riesgo de infección comparable al de los residentes locales. Además de la duración de la visita, para determinar el riesgo de infección también son importantes las condiciones de vida: entre los lugares de alto riesgo se encuentran los centros sanitarios, los refugios para personas sin hogar y las prisiones. Profilaxis: La vacuna BCG es de uso limitado para los viajeros, pero puede ser recomendada para bebés y niños pequeños en algunas ocasiones. Precauciones: Los viajeros deben evitar el contacto próximo con pacientes con tuberculosis conocida. Para los viajeros procedentes de países con baja incidencia, que pueden exponerse a la infección en países de incidencia relativamente alta (por ejemplo, profesionales sanitarios, trabajadores de ayuda humanitaria, misioneros), es recomendable la realización de un test cutáneo de tuberculina con el fin de compararlo con un nuevo test al regreso. Si la reacción cutánea a la tuberculina sugiere una infección reciente, el viajero debe recibir o ser remitido para el tratamiento de la infección latente. Los pacientes en tratamiento no deben viajar hasta que el médico haya comprobado, mediante análisis en laboratorio del esputo, que el paciente no es infecto-contagioso y que, por lo tanto, no representa un riesgo para otros. Se debe subrayar la importancia de completar la totalidad del tratamiento prescrito.




Tifus
Transmisión: La enfermedad se transmite a través de un piojo del cuerpo humano, que se infecta al alimentarse con la sangre de pacientes con tifus agudo. Los piojos infectados excretan rickettsias sobre la piel mientras se están alimentado sobre un segundo huésped que queda infectado al frotar la materia fecal del piojo o al aplastar al piojo dentro de la herida de la picadura. No hay reservorio animal. Naturaleza de la enfermedad: La aparición es variable, aunque a menudo repentina, con cefalalgia, escalofríos, fiebre alta, postración, tos y dolor muscular severo. Después de 5-6 días, se desarrolla una erupción macular (puntos oscuros) comenzando en la parte superior del tronco, y propagándose al resto del cuerpo aunque normalmente no llega a afectar a la cara, palmas de las manos o plantas de los pies. La tasa de mortalidad por casos alcanza el 40% si no se aplica tratamiento específico. El tifus por piojos es la única enfermedad rickettsial que puede causar epidemias explosivas. Distribución geográfica: En las zonas más frías (es decir, montañosas) del centro y este de África, centro y sur de América y en Asia. En los últimos años la mayor parte de los brotes han tenido lugar en Burundi, Etiopía y Ruanda. El tifus ocurre en condiciones de hacinamiento y de malas condiciones higiénicas, en prisiones y campos de refugiados. Riesgo para el viajero: Muy bajo para la mayoría de los viajeros. Los trabajadores de ayuda humanitaria pueden estar expuestos en los campos de refugiados y en otros lugares caracterizados por el hacinamiento y la mala higiene. Profilaxis: Ninguna. Precauciones: La limpieza es importante para prevenir la infestación por piojos. Se dispone de polvos insecticidas para el control de los piojos corporales y el tratamiento de la ropa de aquellas personas con alto riesgo de exposición.




Infecciones De Transmisión Sexual
Las enfermedades y agentes infecciosos de Transmisión más importantes son: VIH/SIDA (Virus de la inmunodeficiencia humana). Hepatitis B (Virus de la hepatitis B). Sífilis (Treponema pallidum). Gonorrea (Neisseria gonorrhoeae). Infecciones por clamidia (Chlamydia trachomatis). Tricomoniasis (Trichomonas vaginalis). Chancroide (Haemophilus ducreyi). Herpes genital (Herpes virus -humano 1 (alpha). Verrugas genitales (Papilomavirus humano). Transmisión: La infección se produce durante relaciones sexuales sin protección. La hepatitis B, el VIH y la sífilis también se transmiten por sangre o hemoderivados contaminados, por agujas o jeringuillas contaminadas usadas para inyecciones y, potencialmente, por instrumentos no esterilizados usados para acupuntura, piercing y tatuajes. Naturaleza de la enfermedad: La mayoría de las manifestaciones clínicas se incluyen en los siguientes síndromes: úlcera genital, enfermedad pélvica inflamatoria, descarga uretral y descarga vaginal. Sin embargo, muchas infecciones son asintomáticas. Las infecciones de Transmisión sexual son una importante causa de enfermedad aguda, infertilidad, incapacidad a largo plazo y muerte, con graves consecuencias médicas y psicológicas para millones de hombres, mujeres y niños. Aparte de ser enfermedades graves por si mismas, las infecciones de Transmisión sexual incrementan el riesgo de infección por VIH. La presencia de una enfermedad no tratada (ulcerativa o no ulcerativa) puede llegar a multiplicar por 10 el riesgo de infectarse por VIH y de transmitir la infección. Por otra parte, el diagnóstico temprano y un mejor tratamiento de otras infecciones de Transmisión sexual pueden reducir la incidencia de la infección por VIH hasta un 40%. Por lo tanto, la prevención y tratamiento de todas las infecciones de Transmisión sexual es importante para prevenir la infección por VIH. Distribución geográfica: Mundial. Las infecciones de Transmisión sexual se conocen desde tiempos antiguos. Siguen siendo un importante problema de salud pública que se ha visto complicado por la aparición del VIH/SIDA alrededor de 1980. Se calcula que se producen 340 millones de episodios de infecciones de Transmisión sexual curables (infecciones por clamidia, gonorrea, sífilis, tricomoniasis) en todo el mundo cada año. Las infecciones virales, más difíciles de tratar, también son habituales en muchas poblaciones. El herpes genital se está convirtiendo en una causa importante de úlcera genital, y algunos subtipos del papilomavirus humano están relacionados con el cáncer cervical. Riesgo para el viajero: Para algunos viajeros puede haber un riesgo incrementado de infección. La falta de información sobre el riesgo y las medidas preventivas, junto con el hecho de que los viajes y el turismo aumentan la probabilidad de tener relaciones sexuales con parejas esporádicas, incrementan el riesgo de exposición a infecciones de Transmisión sexual. Actualmente, en algunos países desarrollados una gran proporción de las infecciones de Transmisión sexual se producen como resultado de relaciones sexuales sin protección durante viajes internacionales. Además de la Transmisión por contacto sexual (tanto heterosexual como homosexual, anal, vaginal u oral) la mayoría de estas infecciones pueden transmitirse de la madre infectada a su hijo no nacido o recién nacido. La hepatitis B, el VIH y la sífilis también se transmiten por transfusiones de sangre o hemoderivados contaminados y por el uso de agujas contaminadas. No existe riesgo de contraer ninguna infección de Transmisión sexual por el contacto diario casual en el domicilio, el lugar de trabajo o por contacto social. No existe riesgo de infectarse por compartir cualquier tipo de medio de transporte colectivo (por ejemplo, aviones, barcos, autobuses, coches, trenes) con individuos infectados. No existe evidencia de que el VIH u otras infecciones de Transmisión sexual se puedan contraer por picaduras de insectos. Profilaxis: Vacunación contra la hepatitis B. No se dispone de profilaxis para ninguna de las otras enfermedades de Transmisión sexual. Precauciones: Está demostrado que los preservativos masculinos y femeninos, si se usan correctamente, son efectivos para prevenir la Transmisión del VIH y otras infecciones, y para reducir el riesgo de embarazos no deseados. Los preservativos de goma de látex son relativamente baratos, altamente fiables y no tienen prácticamente ningún efecto secundario. Se puede prevenir de forma efectiva la Transmisión del VIH y otras infecciones durante las relaciones sexuales usando preservativos de alta calidad correctamente y en todas las ocasiones. Los estudios sobre parejas serodiscordantes, sólo uno de los cuales es positivo a VIH, han demostrado que, con relaciones sexuales regulares durante un período de dos años, las parejas que han usado preservativos en todas las ocasiones, tienen un riesgo de infección por VIH próximo a cero. El hombre siempre debe usar preservativo durante las relaciones sexuales, en todas las ocasiones y desde el principio al final, y la mujer debe asegurarse de que su pareja lo utilice. La mujer también puede protegerse frente a infecciones de Transmisión sexual usando un preservativo femenino (básicamente funda vaginal) que actualmente está comercialmente disponible en algunos países. Es esencial evitar inyectarse sustancias con fines no médicos, y especialmente evitar compartir agujas para reducir el riesgo de contraer hepatitis, VIH, sífilis y otras infecciones a través de agujas contaminadas. Las inyecciones médicas en las que se utilizan medios no esterilizados son también una posible fuente de infección. Si es imprescindible inyectarse, el viajero debe tratar de asegurarse de que las agujas y jeringuillas proceden de un envase estéril o han sido adecuadamente esterilizadas con vapor o agua hirviendo durante 20 minutos. Los pacientes bajo tratamiento médico, que requieren inyecciones frecuentes, como los diabéticos, deben llevar consigo agujas y jeringuillas estériles para todo el viaje y una autorización escrita del médico para su uso. Los instrumentos dentales y quirúrgicos, las agujas usadas en acupuntura y tatuajes, los aparatos para agujerear las orejas y otros instrumentos que perforan la piel no esterilizados, pueden igualmente transmitir infecciones y deben evitarse. Tratamiento: Los viajeros con manifestaciones clínicas de enfermedades de Transmisión sexual deben interrumpir toda actividad sexual y buscar atención médica inmediatamente. La falta de síntomas no garantiza falta de infección y los viajeros expuestos a sexo sin protección deben someterse a análisis para la detección de infecciones al volver a casa. El test de VIH siempre debe ser voluntario y con asesoramiento. Las infecciones de Transmisión sexual causadas por bacterias, por ejemplo, chancroide, clamidia, gonorrea y sífilis se pueden tratar con éxito, aunque no existe ningún antimicrobiano que sea efectivo contra más de una o dos de ellas. Además, en todo el mundo muchas de estas bacterias están mostrando una creciente resistencia a la penicilina y otros antimicrobianos. En las infecciones virales de Transmisión sexual, por ejemplo, hepatitis B, herpes genital y verrugas genitales el tratamiento no es resolutivo debido a la falta de medicación específica siendo difícil la curación. Lo mismo ocurre con la infección por VIH, que en su último estadio da lugar al SIDA siendo éste mortal. Los medicamentos anti-retrovirales no pueden erradicar completamente el virus VIH; el tratamiento es caro y complejo y una gran mayoría de los países tienen pocos centros que pueden proporcionarlo. Exposición accidental a sangre u otros fluidos corporales: La exposición accidental a sangre u otros fluidos corporales se puede producir en centros de atención sanitaria, en desastres naturales o causados por el hombre, o como resultado de accidentes o actos de violencia. Esta exposición puede originar una infección por los patógenos presentes en la sangre, especialmente los virus de la hepatitis B, C y el VIH. El riesgo promedio de seroconversión al VIH tras una única exposición percutánea con sangre infectada por el VIH es del 0,3%, el riesgo de hepatitis C es del 3% y de hepatitis B del 10-30%. La exposición accidental a sangre u otros fluidos corporales potencialmente infectados constituye una emergencia médica. Se deben tomar las siguientes medidas sin demora. Exposición percutánea: En caso de heridas hechas con equipamientos contaminados por sangre, o contacto de heridas abiertas en la piel con sangre u otros fluidos corporales, se debe dejar que la herida sangre libremente; lavar la herida y la piel de alrededor inmediatamente con agua y jabón y enjugar. Desinfectar la herida y la piel de alrededor con un desinfectante adecuado como: povidona yodada al 2,5%, durante 5 minutos, o alcohol, al 70%, durante 3 minutos. Exposición de los ojos o membranas mucosas: Enjugar el área expuesta inmediatamente con una solución salina isotónica durante 10 minutos. En el caso de contaminación de la mucosa del ojo, desinfectar con ¿clorexidina-cetrimide? al 0,05%, 3 gotas administradas dos veces con un intervalo de 10 minutos. Si no se dispone de salino ni de desinfectante, usar agua limpia. En todos los casos se debe consultar a un médico inmediatamente. En ciertas condiciones se recomienda profilácticamente el uso de una combinación de medicamentos anti-retrovirales para prevenir la Transmisión del VIH tras una exposición accidental a sangre u otros fluidos corporales infectados. La decisión de aplicar este tratamiento depende de varios factores, incluido el estado originario del individuo con relación del VIH, la naturaleza del fluido corporal implicado, la severidad de la exposición y el período entre la exposición y el inicio del tratamiento (que nunca debe ser superior a 48 horas). Se debe llevar a cabo la repatriación tan pronto como sea posible. Si se han realizado análisis de VIH, hepatitis B y C, son necesarios nuevos controles a las 6 semanas y a los 6 meses después de la exposición. Se debe ofrecer apoyo psicológico en estos estadios a las personas cuyos resultados sean positivos. Tras una exposición accidental el individuo expuesto no debe tener relaciones sexuales sin protección, hasta que los análisis post-exposición realizados 6 meses después confirmen que no es seropositivo/a. Las mujeres deben evitar quedarse embarazadas durante este período.